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jueves, 19 de junio de 2014

El ilustrador de la cotidianidad mexicana

El ilustrador de la cotidianidad mexicana

Santa Catalina acoge una selección de obras del conocido dibujante José Guadalupe Posada
VIRGINIA LEÓN CÁDIZ | ACTUALIZADO 19.06.2014 - 05:00
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Un momento de la inauguración de la obra del desaparecido José Guadalupe Posada.
La cotidianidad del México que un siglo atrás supo ilustrar en todas sus facetas José Guadalupe Posada (1852-1913) toma la sala de San Nicolás del Castillo de Santa Catalina. El padre de las calaveras catrinas que un día descubrió y popularizó Diego Rivera, inunda de su ilustraciones satíricas la fortaleza gaditana, en la primera incursión de su obra en España.

Posada. Fantasías, calaveras y vida cotidiana es el título de esta muestra que ayer fue inaugurada por Teófila Martínez y el concejal de Cultura, Alejandro Varela, en un acto que contó con la presencia del agregado de la Embajada de México, Pablo Raphael de Lamadrid, el también diseñador gráfico
 Juan Manuel Álvarez Junco y el investigador y comisario de la muestra,
Agustín Sánchez González.

De su mano recorrieron esta muestra cargada de crítica y muchos acontecimientos
del día a día del país. Una selección de 150 imágenes entre las más de 20.000 
obras que se calcula comprende su amplia producción, "pues nunca se ha 
inventariado" y que da comienzo con la exhibición de las primeras caricaturas
que publicó a sus 17 años en el periódico local de su tierra natal, El jicote. Una
serie de ilustraciones que dan paso al universo de este artista que en su día
pasó desapercibido en su México natal, a pesar de que "todo el mundo, de
todas las clases sociales, tenía alguna obra suya en casa sin saberlo".

Y es que su obra, seccionada en numerosos capítulos en esta muestra, fue
apareciendo de forma prolífica de la mano de varios impresores. "Eran 
hojas informativas, de esas que se vendían en la calle a un precio muy 
barato". De la mano de varios impresores como el abuelo del nobel de
Literatura, Octavio Paz y sobre todo de Antonio Venegas Arroyo, el dibujante
informó incansablemente de los más diversos acontecimientos, de forma
original, divertida, seria y satírica. Tenía para todos el ilustrador, "dibujó todas 
las facetas de la vida en México, trazó la línea del arte mexicano y de muchos
 de los iconos que los ilustran", desde las fiestas, hasta la vida política, religiosa,
 juegos de mesa, para niños y mayores, sus personajes populares y anónimos
y costumbres de una tierra que caló profundamente en su obra. "Ilustró
lo alegre y lo triste", nada de escapó de su mirada crítica y de su innegable talento.

"La selección que he realizado expresamente para España -después de Cádiz pasará por
Alcalá de Henares- recoge así todos los aspectos que he considerado oportunos
incluir de su extensa obra", como gran conocedor de la misma. Una selección que
parte de colecciones privadas, y que abarca desde la religiosidad, con imágenes de
vírgenes y santos a los que se encomiendan sus fieles, pasando por las fiestas 
populares y cancioneros mexicanos; dibujos que satirizan la clase política, la 
vida de sus paisanos y de la que ellos denominan "garbanceras, que son 
las mexicanas que renegaban de sus raíces, y a las que les auguraba el mismo 
final que a todos"; otros que ensalzan los valores populares o que 
mordazmente satiriza la clase política, ilustrando numerosos acontecimientos 
de la actualidad de finales del XIX y principios del XX. A modo de
 curiosidad del vínculo de la obra con España, recoge la ilustración del intento de
asesinato de Alfonso XIII , así como la influencia que sobre su obra tuvo Goya.

Destacan particularmente la serie de cuentos que ilustró expresamente para niños,
"los primeros que se hicieron en México", y que se publicaron en Barcelona con una
tirada de 150.000 ejemplares, así como la obra pertenecientes a sus calaveras sobre
 El Quijote.

De estas calaveras que popularizó su producción se exhiben varias que hablan desde
la prensa, hasta las profesiones artesanas, los políticos o los mexicanos. "Era conocido
 por sus calaveras, pero sin embargo, sólo las hacía en el día de todos los santos",
puntualizaba.

Nada le haría presagiar a este prolífico dibujante y grabador, cuya vida acabó en la
miseria, que su obra rotaría por el mundo, y que se exhibiría en los múltiples
homenajes que ha recibido en los últimos años, fundamentalmente en el del 
centenario de su muerte el pasado año. "En un momento coincidieron hasta
 tres exposiciones en apenas tres kilómetros", decía de su relevancia 
Agustín Sánchez González , con más de 30 libros sobre la vida y obra de
 Posada en el mercado. Entre ellos, el cuidado catálogo de esta exposición,
 Fantasías, calaveras y vida cotidiana, que incluye una obra original del 
autor de una serie limitada. La de un autor que dibujó México en toda
su amplitud.

José Guadalupe Posadas Castillo de Santa Catalina, Puede verse hasta el 7
de septiembre.

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