martes, 8 de mayo de 2018

El cartón del mes. Como ayer: el panorama es negro

Este mes, en la revista Relatos e historias en México, como en cada número, presento una caricatura publicada en La Orquesta, por Santiago Hernández, un caricaturista juarista sumamente crítico que no dudó en cuestionar NUNCA, al presidente Juárez, al contrario de lo que sucede hoy en día cuando la caricatura militante no toca a su candidato ni con un pelo del pincel, regresando a épocas aparentemente superadas de apoyo sumiso a un caudillo. 
Como hace más de cien año, nuestro futuro es negro con cualquier candidato 

lunes, 7 de mayo de 2018

Historia de la Caricatura en México y de José Guadalupe Posada, en el TALLER LA CATRINA, de Monterrey


Agustín Sánchez González imparte un microseminario en la ciudad de Monterrey, llamado:





Historia de la Caricatura en México
y de José Guadalupe Posada,
en el TALLER LA CATRINA, de Monterrey

El Taller la Catrina es un espacio privado dedicado a la producción y formación, preservando la técnica del grabado en la ciudad de Monterrey, así como la exploración de diferentes técnicas, tanto en metal como en madera. Promueve, además, la creación artística, presentando exposiciones, cursos para niños, jóvenes y adultos.

Dirigido por la maestra Angélica Bracho, artista multidisciplinaria, Licenciada en Artes Visuales por la UANL, tiene un  posgrado en EINA de Ilustración creativa y Técnicas de Comunicación Visual otorgado por la Universidad Autónoma de Barcelona, España.  En el cómic se ha destacado siendo artista para publicaciones juveniles en editoriales como Stonearch Books y Espasa, ha colaborado con el estudio Graphikslava donde realizó color digital para comics de las editoriales Marvel, IDW, entre otras. Se ha especializado en la técnica de grabado cómo técnica para ilustrar de manera muy narrativa, siempre contando con una historia detrás de cada pieza elaborada. Una de sus obras más relevantes ha sido parte del proyecto de residencia e intercambio “Urbanografías” que se realizó en conjunto del Centro de las Artes de Guanajuato en Salamanca, Gto.  y el Centro de las Artes de Nuevo León.  Dicho proyecto se expuso dentro del marco del Festival Cervantino 2014 y en 2015 se llevó a la Nave Generadores de CONARTE en Nuevo León. En 2013 fueron seleccionados tres de sus miniprints para la 33ª Muestra Internacional de Miniprint, en Cadaquez, España. La muestra fue llevada a Windfield Barns, Reino Unido, Fundació Tharrats d'Art Gràfic, Pinedas del Mar, España y In L'Etangd'Art, Bages, Francia.


El martes 15 de mayo, de 19 a 22 horas,  se llevará a cabo un
Microseminario:
Historia de la Caricatura en México
y de José Guadalupe Posada,


Imparte Agustín Sánchez González,
considerado como uno de los más importantes investigadores de caricatura mexicana, que platicará sobre el origen de la caricatura, sus primeras expresiones y técnicas, como la litografía, hasta llegar a la obra de José Guadalupe Posada.
Durante este evento, se podrá admirar de cerca, sin vitrinas ni marcos de por medio, varias piezas originales, litografías, de los grandes maestros de la caricatura como Constantino Escalante, Santiago Hernández y José María Villasana, así como dos placas originales de José Guadalupe Posada, de hace 120 años, y otras zincografías.
Agustín Sánchez González es autor de más de 30 libros, destacando su Diccionario Biográfico Ilustrado de la Caricatura en México, que s eha convertido en una pieza emblemática y de culto, así como la Historia d ela caricatura en México, publicado por editorial Milenio, de España, en coautoría con la Dra. Esther Acevedo.
Informes e inscripciones lacatrina@angelicabracho.net
Tel. 83 44 78 69 de 11 a 3pm






domingo, 6 de mayo de 2018

Qué fácil sería para esta mosca... Poema de Rubén Bonifaz Nuño

https://nexos.com.mx/?p=15214
Rubén Bonifaz Nuño escribió un gran poema que me recuerda este momento histórico de México en donde nuestros connacionales "no hacen otra cosa  que achatarse los ojos, con todo su peso, contra el vidrio duro que no comprende"







Qué fácil sería para esta mosca...

Qué fácil sería para esta mosca, 
con cinco centímetros de vuelo 
razonable, hallar la salida. 

Pude percibirla hace tiempo, 
cuando me distrajo el zumbido 
de su vuelo torpe. 
Desde aquel momento la miro, 
y no hace otra cosa que achatarse 
los ojos, con todo su peso, 
contra el vidrio duro que no comprende. 
En vano le abrí la ventana 
y traté de guiarla con la mano; 
no lo sabe, sigue combatiendo 
contra el aire inmóvil, intraspasable. 

Casi con placer, he sentido 
que me voy muriendo; que mis asuntos 
no marchan muy bien, pero marchan; 
y que al fin y al cabo han de olvidarse. 

Pero luego quise salir de todo, 
salirme de todo, ver, conocerme, 
y nada he podido; y he puesto 
la frente en el vidrio de mi ventana. 

viernes, 4 de mayo de 2018

El sabio Monsiváis hoy cumpliría 80 años

Monsiváis, nació en La Merced el 4 de mayo de 1938. Hoy cumpliría 80 años de no habérselo llevado patas de cabra. De todos modos, siempre queda en nuestros corazones.

Les regalo una cuantas caricaturas que le hicieron Gabriel Vargas, Sixto Valencia y Francisco Mora, además de una foto cuando le entregaron la Medalla José Vasconcelos a Gabriel Vargas.

Ah, por cierto, el domingo 13 de mayo se llevará a cabo un paseo literario que se lleva por título Viaje al corazón de Monsiváis.

El humor en tiempos de la Constitución en el Museo de Historia Mexicana de Monterrey



Redacción/Ágora Política
Monterrey, N.L.- El Zancudo publicación de humor que surge en los días previos a la promulgación de la Constitución Política de 1917, en Querétaro, servirá de base para la conferencia El Zancudo y el humor en la Constitución de 1917, que se presenta el próximo 16 de mayo a las 19:30 horas en el Museo de Historia Mexicana.
La presentación a cargo de Agustín Sánchez, aportará la visión de crítica y humor que imperaba en el contexto social en el que se promulgo la Carta Magna mexicana.
Actualmente el Museo de Historia Mexicana presenta la exposición “La búsqueda de un ideal, la Constitución de 1917”, que reflexiona sobre el proceso revolucionario en forma crítica y las consecuencias que tuvo la escasa representación de las clases populares en el Congreso Constituyente de Querétaro en 1916.
Agustín Sánchez González es considerado como uno de los más importantes estudiosos del humor gráfico, es autor de cerca de 40 libros, e investigador del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas, CENIDIAP. Para el Museo de Historia Mexicana ha curado las exposiciones Una historia muy monita, y Posada. El gran ilustrador de lo mexicano.
El Zancudo fue una publicación en pequeño formato que circuló mientras se desarrollaban los trabajos del Congreso Constitucionalista. El primer ejemplar surgió el 11 de enero de 1917, con un singular lema de autor anónimo: “Sale cuando se le hincha y no se les hincha cuando les pica” y también decía: “El director, no se raja cuando lo busquen”.
Aunque sólo se publicaron cuatro números los días 11, 18 y 25 de enero y el 1 de febrero, en El Zancudo participaron personalidades como Marcelino Dávalos, poeta, dramaturgo y periodista; autor de media docena de títulos como Carne de cañón; fue director de El Universal, y publicó en El Mundo Ilustrado, en Revista de revistas y Savia Moderna, revista fundamental en la creación del Ateneo de la Juventud.
Las conferencias tendrá entrada libre y las personas interesadas en mayor información se pueden poner en contacto a través de las redes sociales de 3 Museos o en la página  www.3museos.com

lunes, 23 de abril de 2018

Un Óscar al Auditorio Nacional

Este domingo, en el super, me encontré a Oscar Chávez. Recordé entonces el concurso de crónicas convocado por el Auditorio Nacional en el cual obtuve una mención honorífica con este trabajo que después publiqué en La Jornada Semanal.

Pueden escuchar a Óscar mientras lo leen




Agustín Sánchez González

Un Óscar al Auditorio

"Voy a buscarte, voy a encontrarte"... 
     Se dice fácil, pero hará ya más de un tercio de siglo que lo vi cantar por vez primera. 
     Por esos días dibujé a Mariana.
     "Fuera del mundo". 
      Estaba, estábamos, en una bodega, muy cerca de los rumbos del Teatro Blanquita. Eran los estudios del viejo Canal 13. Jorge Saldaña presentaba su programa "Nostalgia" y yo, como si nada, había entrado a la estación sin que nadie me detuviera o siquiera preguntara ¿a dónde va?
      Un hombre vestido con pantalón y camisa negra me asombró. "Me quisiera comer un panecillo con azúcar y canela muy caliente". Los ojitos se me hicieron agua de la pura emoción. Óscar Chávez.
       "Yo andaba buscando la muerte, cuando me encontré contigo." La sonoridad del Auditorio Nacional. "Por ti yo dejé de pensar en el mal."
       ¡Muchas veces quise cantar como él! ¡Cuántas, he mirado la misma historia en el mismo lugar! La ciudad ya no es la misma, pero sigue teniendo el mismo doloroso encanto.
        Por entonces no existía la estación del metro Auditorio y un autobús nos hacía llegar del metro Chapultepec hasta acá, aunque la mayoría de las veces echábamos a andar.             Cuántas historias desde entonces.
       Mariana tenía nombre de una canción de Óscar, con ella caminé una noche oscura por Paseo de la Reforma, después del concierto, con la dulce y tenue esperanza de convertirla en mi amor.
      Acaso la historia no es más que el recuento de los tiempos, el cantar de gesta, el retrato de un mundo que ya no fue. Es la vida de los medios: en estos años hemos pasado del disco de acetato de treinta y tres revoluciones por minuto, al MP3, pasando por el cassette y el CD.
      "Por ti bella Mariana, por ti lo puedo todo, el mundo entero si me mandas te lo pongo de otro modo."
      Óscar Chávez con su imponente voz, entonando cantos de un guerrero que rinde un homenaje al amor, a la patria, a nosotros, a cada cachito de espacio que nos han dejado.            Son aquellas notas que repican hace... pongamos treinta o cuarenta años.
      Desde la primera vez que lo vi, hasta hoy, el mundo ha dado más de diez mil vueltas. La piel se arrugó un poquito, el cabello se fue para siempre, pero Óscar sigue ahí, fuera del circuito comercial y dentro del corazón de miles que vamos una vez al año al Auditorio, cual si fuera manda o peregrinación, a escucharle las mismas canciones que son, a la vez, nuevas interpretaciones.
         Mariana.
         Leímos juntos Cien años de soledad y disfrutamos escuchar Macondo, con Óscar. Sentimos mariposas amarillas la segunda vez que la invité al Auditorio.
        También descubrimos a Octavio Paz, a través de la historia del hombre muerto.
        "No acabarán mis flores, no cesarán mis cantos." 
       Toda la ciudad sonaba de maravilla cuando escuché decir a Óscar que era un homenaje a esta urbe tan terroríficamente hermosa.
       Entonces, como siempre, el trío Los Morales posó y tocó a su lado, lo acompañaron con el gusto de los amigos que se encuentran a cada rato y celebran la comunión a través del canto, la música, el amor y todo lo demás.
      "No se puede ser de derecha y que te guste Óscar Chávez", decía enojada Mariana a una de sus amigas, hija de un prominente panista.
       Y es que Óscar, además, ha sido consecuente con un discurso político de izquierda. Treinta años después, cuando las críticas a Castro arrecían, la gente sigue pidiendo "de tu querida presencia, Comandante Che Guevara".
       "La casita", ha sido un símbolo permanente para protestar por la corrupción de nuestros políticos, además de las decenas de maravillosas parodias, cuando la parodia no llegaba a la televisión y resultaba harto peligroso hacer la crítica del poder, como cuando canta al angelito que murió por culpa del sistema social "que nos mata de a poquito".
       ¡Cuántas cosas! Cuántas imágenes recreadas mientras cierro los ojos, un sábado 27 de agosto, día de Santa Mónica, cuando Óscar estuvo de nueva cuenta en el Auditorio, en 2005.
        Cierro los ojos y miro el transcurrir de la vida a través de la voz de quien parece que se ha impregnado en nuestra piel ya para siempre. "Pensamiento, dile a fragancia que yo la quiero."
        Un día Mariana se despidió (qué decente soy para decir que me dejó).
        Me escribió una carta que decía que cuando escuchara a Óscar Chávez, ahí estaría ella y que, además, si caminara por Paseo de la Reforma, una de esas noches veraniegas y lluviosas de agosto o septiembre, ella me acompañaría, muy silenciosa, sin interferir si yo fuera con alguien. "De ahí tengo el corazón en dos mitades partido."
         Óscar Chávez ha recorrido el Auditorio de arriba a abajo, ha cantado cientos de canciones, ha unido a decenas de parejas y más de uno, estoy seguro, hemosinventado, con o sin su venia, alguna frase, alguna canción para decirle a la otra algo muy quedito, de nuestro amor.
         Mariana se marchó, no apareció más. 
         Tuve suerte, pues aunque sufrí un buen, no me morí de amor, como la niña de Guatemala.
        Con las lluvias llega Óscar al Auditorio.
        Antes de marchar al viejo bosque, escuché el nuevo-viejo disco, Tropicanías de hace veinte años: "Era que todo fue un sueño, pero logré mi empeño porque te pude besar."
Paréceme que lo mejor es decir, como al Che, hasta siempre, pues "aunque han pasado los años, nunca ha pasado aquel día" y Óscar, localizable los 365 días del año, me tiene marcado.
         La luz se apaga, el silencio llega y la voz de siempre suena y resuena en el Auditorio y entonces, como cada año, el fantasma de Mariana es invocado, mientras la gente es convocada a cantar, a corear, a gritar, a emocionarse y a que la piel se ponga chinita chinita pues otra vez estás, como siempre, querido Óscar Chávez...

http://www.jornada.unam.mx/2006/09/03/sem-oscar.html

sábado, 21 de abril de 2018

Bolitas para robar incautos

Todos los robos son malsanos, pero estos, que juegan con la ingenuidad (y con el sueño de hacer rico sin trabajar) no tienen abuela. Esta historia sucedió en 1994, y ha vuelto a suceder cada equis tiempo pues, nunca faltan los que caen.




Hace unas semanas hablaba del ejército de pobres que aparece todos los días por la ciudad y el país entero; su uniforme es la miseria y su futuro, a pesar de los discursos triunfalistas y duros de pelar y creer, está por verse, como diría alguno de los cantantes invidentes que andan por el Metro.
No es que uno sea vidente, más bien, es tan evidente para quienes estamos atentos al cielo urbano; así, uno puede darse cuenta de cómo anda la cosa. Digo esto pues acaba de descubrirse un enorme fraude con unas bolitas de PH de las que hablaba en aquella crónica y que ahora se encuentra que la mejor definición de PH es, obvio, la pura histeria de lo que se transaron.
Vaya usted a saber cuántos cientos de incautos clasemedieros cayeron en el complejo fraude. Resulta que los sueños de tercera mano, de riquezas inmediatas, de dejar la pobreza, pagar las deudas con los agiotistas bancos y sus modernas tiendas de raya, se hicieron realidad a través de las tarjetas de crédito. Pero aprovechando sus ilusiones un grupo de vivales se dedicó a vender materia prima dizque para elaborar unas bolitas de PH.
 Todo era muy sencillo: unos laboratorios norteamericanos las compraban y debían producirse de manera artesanal, dejándolas al sereno durante varios días y ya. La riqueza en forma de bolita se dejaría venir. El costo del material era de setecientos cincuenta nuevos pesos y, a cambio, recibirían más del doble.
Para algunos parece que así fue... al principio, para que se confiara y para calentar el ambiente, pero después se encontraron con la triste realidad: "la empresa", con varias sucursales, desapareció tal como vino al mundo y no dejó rastro, o al menos así parece.
Las bolitas para salir de pobre se transformaron en bolitas para robar incautos, para endeudar más a nuestra pobre pícara soñadora clase media, capaz de perder los setecientos cincuenta, o más. Porque está claro que los pobres-pobres, los que viven la economía   de la oferta y la demanda (todo compran en oferta y les cobran con demandas), no tenían la capacidad de invertir en este ultra fabuloso negocio del primer mundo.
Así que ahora se quedaron como novias de pueblo, el sueño desapareció, se esfumó como pompa de jabón.
La pobreza seguirá, las deudas aumentaron y ya deben hasta el aguinaldo del 94, mientras los genios que inventaron las bolitas fueron a tirar éstas a Xochimilco, dicen, y andarán por Andorra del Norte, Madagascar o vaya usted a saber dónde, disfrutando de la lana que robaron, decentemente, eso sí, a los incautos que cayeron.

Por el fin de los caudillos

  No a los caudillos, si a la pluralidad Agustín Sánchez González Se les mira por las calles en pequeños grupos, portan un chaleco con l...