sábado, 17 de enero de 2015

La muerte de Juan Sabino Posada hace 115 años

El trabajo de un investigador se parece mucho al de un detective: hurgar lugares, sacar conclusiones, buscar documentos comprobatorios. 

En ese sentido, durante años he hurgado en la vida de muchos personajes y he realizado muchas lecturas de los mismos. 


Uno de los casos donde me siento más afortunado, y tal vez el más notorio, es el descubrimiento de el acta de defunción del hijo de José Guadalupe Posada. 


La historia de Posada fue manipulada durante muchos años, con lugares comunes, con historias falsas. En 2007, en un golpe de suerte y tras buscar durante años pistas de Posada, me encontré una breve noticia en El Diario del Hogar, que decía:



   DEFUNCIÓN.-
 A las dos de la madrugada del día 18 del corriente, dejó de existir 
 en esta capital el joven Juan Sabino Posada, hijo del Sr. D. José
 Guadalupe Posada, antiguo grabador y litógrafo muy estimado
 en México por sus cualidades. Enviamos nuestro más sentido 
pésame al Sr. Posada, deseando el eterno descanso para el
alma del finado”.


Busqué la noticia en otros medios y, como si fuera boletín de prensa, la encontré en otros dos periódicos: El Popular, y en El Chisme.


Con esos datos, me dirigí al Registro Civil y tuve la suerte de encontrar el acta de defunción y romper uno de los grandes misterios de la vida de Posada: Sabino (sin el Juan de los periódicos, algo que hay que aun hay que dilucidar pues probablemente nació el día de San Juan y por eso los amigos de Posada llamaban así)

La alegría fue intensa, una entrevista en el periódico El Universal, del 12 de septiembre de 2007 da cuenta de ello. http://www.eluniversal.com.mx/cultura/54020.html

Juan Sabino, pues, murió hace 115 años en la hoy calle de República de Nicaragua, entonces llamado Cuadrante de Santa Catarina, en un punto equidistante entre el Zócalo y Tepito.

Esta es la historia de ese descubrimiento, mismo que más de uno han querido escamotearme.

El humor necesario y la responsabilidad, texto de Manuel A. Junco

Un texto espléndido de un excelente artista español, Manuel A Junco que aparece este 18 de enero en El País


Junco es un humorista gráfico, tal vez el más importante teórico de este tema (que además es un gran humorista gráfico)

El humor necesario y la responsabilidad

La labor del humorista consiste en tomar algo que se considera formalmente aceptable y normal y desvelar que no lo es



Viñeta del rey Luis Felipe de Francia, de Daumier y Philipon, 1832.
El humor es la capacidad humana para percibir aspectos ridículos o absurdos de la realidad y destacarlos ante los demás de forma ingeniosa. Este fenómeno siempre nos ha servido para obtener una visión diferente de la vida y ensanchar las interpretaciones de los conflictos propios y ajenos. El humor nunca va dirigido a descubrir la verdad ni posee una precisión constructiva, ya que su misión es la opuesta, ir "a la contra" y evidenciar la mentira. Y esa labor de descubrimiento o "denuncia" de lo tapado no es fácil ni gratuita, por mucho que adopte apariencias frívolas o estúpidas. Aun sin ser "verdadero", el humor es necesario, ya que de él nos nutrimos diariamente y nos servimos para defendernos de este desordenado mundo.

Debemos tributar nuestro rendido agradecimiento a Charlie Hebdo y su labor de sátira indiscriminada frente a cualquier integrismo, sea musulmán, cristiano o judío
La labor del humorista consiste en tomar algo que se considera formalmente aceptable y normal y desvelar que no lo es. La presa favorita de la sátira y la parodia es lo considerado serio, correcto y solemne.
La consecuencia es que el humor es divertido y plausible para quienes están en contra de las "verdades" oficiales. De igual manera,se convierte en odioso para quienes comulgan a rajatabla con ellas. Un ejemplo es qué fácil resulta burlarse de las costumbres de culturas ajenas y qué inaceptables parecen las críticas hacia las nuestras, por extravagantes que estas sean a los ojos de los otros.
Con motivo de la terrible tragedia que se ha producido estos días en París, debemos afirmar que la libertad de expresión es sagrada, piedra angular de nuestra civilización, duramente conquistada por generaciones de grafistas desde Hogarth, Goya o Daumier.
Debemos tributar nuestro rendido agradecimiento a Charlie Hebdo y su labor de sátira indiscriminada frente a cualquier integrismo, sea musulmán, cristiano o judío. Lo primero es lo primero, ya que nos jugamos la calidad de nuestra sociedad y el derecho a dirigir al menos nuestra sonrisa sarcástica ante la frase sonora del pomposo manifiesto del poderoso de turno.

El humor también debe ser responsable. No todo rasgo de humor es incuestionable y oportuno en cualquier momento y ocasión
Pero hay que añadir algo. Siendo, como es, básico y necesario, el humor también debe ser responsable. No todo rasgo de humor es incuestionable y oportuno en cualquier momento y ocasión. Nadie defenderá una broma sobre una víctima de violencia de género, un chiste repugnante ante un niño, un ocurrente petardo en una reunión de víctimas del terror, una graciosa cerilla en un polvorín. Todos sabemos cuándo una broma es responsable y cuándo no lo es.
Ridiculizar al diferente, al débil, al "defectuoso" es un viejo y pobre recurso humorístico. Los tartamudos, los extranjeros, los enanos, los sexualmente distintos, los ignorantes, las mujeres, han sido "carne de cañón" del humor. Y siguen siéndolo. El humor es transgresor y subversivo por su propia naturaleza y siempre se moverá en el contrapunto, en lo informal, en lo contrario, en lo crítico; en definitiva, en el descubrimiento de los intersticios de nuestro orden, de nuestras normas y formas. Por eso, por ser incorrecto e imprescindible a la vez, debe ser responsable y meditado.

domingo, 11 de enero de 2015

Posada el gran ilustrador de lo mexicano

Una de las más importantes exposiciones dedicadas a José Guadalupe Posada, se realizó de noviembre de 2012 a febrero de 2013 en el Museo de Historia Mexicana, de Monterrey, y llevó como título Posada. El gran ilustrador de lo mexicano.

Este es uno de los anuncios que se hicieron para difundir una muestra esplendida sobre este héroe cultural mexicano:






sábado, 10 de enero de 2015

Carlos Neve: Las líneas perdidas

La Jornada Semanal,   domingo 19 de marzo  de 2006        núm. 576
 

Agustín Sánchez González
Carlos Neve: Las líneas perdidas
Los ilustradores de la prensa pertenecen a un género completamente menospreciado, no obstante la gran calidad mostrada por muchos de ellos. En estos días, el Museo de la Caricatura presenta una muestra de Carlos Neve, un excepcional dibujante y caricaturista a quien la historia ha marginado. La exposición se llama La ilustración periodística de Carlos Neve, y está conformada por cincuenta dibujos cuya temática básica es la nota roja, que publicó en el periódico El Demócrata en la década de los veinte.
El retrato de una sociedad postrevolucionaria marginada y agresiva, que se hallaba en busca de sí misma y curaba sus males con la violencia, es lo que dibuja magistralmente Carlos Dionicio Neve Martínez, nombre completo de este gran dibujante nacido en Xalapa, Veracruz, en una fecha incierta (se dice que en1894-1895, o en 1890, indistintamente).
Como todo artista olvidado, sus primeros pasos se pierden o a veces se mitifican. Según el crítico Xavier Moysen, Neve publicó sus primeros trabajos en El Demócrata, mientras que Mercurio López señala que comenzó en la Revista Azul, y más tarde en la revista Multicolor, aunque también dice que el poeta Salvador Díaz Mirón, su paisano, se encargó de conseguirle trabajo en El Imparcial.
Hace unos meses encontré en el acervo del Museo de la Caricatura seis cartones firmados por Canta, uno de ellos publicado en la revista Moheno,editada en 1913. Gracias a unas caricaturas de la bailarina argentina Antonia Mercé, que ilustran un poema de Efrén Rebolledo, encontré la clave para entender que ese seudónimo corresponde a Neve, como lo da a conocer la revista Pegaso en unas caricaturas que Canta (Neve), realizó.
Esto viene a responder, sin duda, un cuestionamiento realizado por el maestro Moysen quien escribió, en 1984: "Rafael Carrasco Puente y Santiago R. De la Vega, sin mayor análisis de los dibujos vieron en el artista a un caricaturista."
Ambos autores tenían razón respecto a los monos hechos por Neve en la revista Moheno que se publicaron entre 1913 y 1914. De hecho, en el único ejemplar que conozco, el número 4, todas las caricaturas son de Neve. (Cabe aclarar que este seudónimo también se le ha atribuido al dibujante López Ayala, pero los trazos del dibujo y la firma de Neve y de Canta son muy semejantes, además del rostro femenino, al que siempre le dibuja una nariz muy parecida.)
Existe otra revista de la época llamada Caricaturas, de 1914, donde las caricaturas también son de Canta. El director de la revista es Ignacio Baeza, el mismo de Moheno, lo que hace suponer que es una continuación de ésta.
No son, por cierto, las únicas caricaturas realizadas por Neve, las hay en revistas como El Revolucionario; además, Neve realizó una historieta en el periódico El Universal llamada S M Segundo i, rey de Moscabía, con argumento de Hipólito Zendejas, otro de los personajes de quien urge una buena biografía.
Desde los años veinte trabajó en El Universal y en El Ilustrado, así como en La Prensa y en la revista de la crom, así como en Vea. En los años cuarenta continuó haciendo cómics en las revistas editadas por Editorial Novaro, con títulos como Tesoros de cuentos clásicosLeyendas de AméricaEpopeya y otras que publicaba esa editorial.
Otro aspecto importante de Neve fue su papel en la publicidad pues trabajó en la Casa Maxims, una de las primeras agencias de publicidad, pero ya desde 1913 había realizado anuncios para diversas revistas.
En su libro Imágenes del deseo, Julieta Ortiz llama la atención sobre el trabajo de Neve en la primera portada a color de Revista de Revistas, así como el siguiente comentario: "El primer anuncio firmado por Neve que localicé data del 12 de enero de 1916 y se refiere a La Aurora del Pánuco." En la muestra del Museo de la Caricatura existen algunos ejemplos de su trabajo en la publicidad.
Neve fue un estupendo ilustrador de más de treinta libros de autores tan disímbolos como Julio Sesto (La tórtola del Ajusco Azulejos), Heriberto Frías (Águila o Sol), Rosendo Salazar (Las pugnas de la gleba), La sombra, de Edgard Allan Poe y veinte etcéteras más.
Neve obtuvo varios reconocimientos: la Medalla de Oro, en Alemania, y una condecoración en la Feria de Covadonga, por sus dibujos taurinos. Cinco dibujos de esta temática se pueden ver en el Museo de la Caricatura.
Otra faceta de Neve, finalmente, fue la creación, en 1955, de seis murales para la Secretaría de la Defensa Nacional.
Casi toda la caricatura y los dibujos publicados en la prensa escrita en el mundo se han perdido, por eso es importante la exposición que hoy podemos admirar: una muestra que recoge las imágenes dibujadas a partir de abril de 1919, cuando Carlos Neve comenzó a ilustrar las crónicas de Miguel Necoechea, uno de los grandes reporteros de nota roja en el periódico El DemócrataDiario Constitucionalista, hasta que éste desapareció.
Los hermosos trazos que Neve realizó en este periódico, del cual llegó a ser jefe del departamento de dibujo, dejan constancia de un país de horror; son trazos en línea —con maravillosos claroscuros—, compuesta por infinidad de detalles y en estilo art nouveau.
Ese medio centenar de piezas originales que hoy se exhiben fueron resguardadas, con la anuencia de Neve, por su ayudante, Carlos Alberto Salinas. Su hijo, Carlos Salinas Saucedo, director de eventos especiales de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), los retomó, enmarcó y entregó en custodia a la propia universidad.
Al igual que el trabajo realizado por José Guadalupe Posada, quien hizo de la nota roja toda una galería de dibujos geniales, Neve, en otro estilo, realizó líneas excepcionales, obras bajo la influencia del art nouveau, pero que también acusan los trazos de la caricatura de la revolución, o de las figuras grotescas de José Clemente Orozco, así como de las imágenes publicadas en revistas como Multicolor Ojo parado.
El art nouveau, definido como "un microbio patógeno dentro del arte decorativo" se convirtió, en el lápiz de Neve, en un microbio que se propagó en un mundo de horrores y miseria. Su obra juega con una línea muy fina, de gran calidad.
Un importante crítico, Xavier Moysen, calificó a Neve como uno de los grandes maestros del dibujo pues sus dibujos mantienen un discurso visual impresionante, de una gran expresividad. Hermanado con Julio Ruelas, pero sobre todo con Roberto Montenegro, Neve tiene un estilo propio donde destacan, al detalle, los elementos apocalípticos de ese México que se niega a desaparecer.

jueves, 8 de enero de 2015

Colegas lamentan la muerte del periodista Julio Scherer



México, 7 Ene (Notimex).- Como un maestro, un hombre que se preocupó por
investigar la verdad, por develar las mentiras de los poderosos, pero sobre todo 
como un visionario del periodismo mexicano, recordaron colegas al periodista 
Julio Scherer (1926-2015) fallecido esta madrugada, en la capital del país.

Adriana Malvido, Agustín Sánchez González y Jorge F. Hernández lamentaron la
 muerte del fundador de la revista “Proceso”, quien es considerado uno de
 los mejores periodistas en la historia de México.
El periodista e investigador del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), Sánchez
 González se refirió a Scherer como uno de los personajes que abrió los
 causes de la democratización de la prensa, a través del diario “Excélsior”.
Asimismo, agregó que tras la ruptura que le dio el entonces gobierno del
 presidente Luis Echeverría, se abrieron nuevos medios impresos en el país.
“Esa apertura marcó una suerte de abanico en diferentes medios, ese fue la
 pauta para abrir otros medios como el UnoMásUno, El Financiero y una oleada
 que sin duda tienen el antecedente de Scherer, además de haber contado con
 una camada de grandes periodistas que aunque se pelearon y luego rompieron, 
fueron una generación de grandes como: Miguel Ángel Granados Chapa,
 Froylan López Narváez o Vicente Leñero”, expresó.
“Fue un visionario del periodismo que deja una huella fuerte dentro de la 
historia nacional”, indicó Sánchez González al tiempo que destacó que el periodista
 tuvo “el tino” de juntarse con grandes autores como Octavio Paz, con quien hizo 
“Plural” en su época de “Excélsior”.
Por su parte, la escritora y también Adriana Malvido, recordó a Scherer como un gran 
escritor, cuya pasión por la palabra y verdad no tenía límites.
“Hay que recordar su ética, su libertad para ejercer el periodismo y hacerlo siempre
 desde el ángulo más difícil que es la crítica contante, la observación y el oficio llevado
 hasta sus más últimas consecuencias”, dijo.
Refirió que el gremio esta de duelo, toda vez que, lo que hizo Julio por la historia del
 periodismo en México, es de una importancia incuantificable, en cuanto a la 
calidad del periodismo que realizó y la escuela.
Dijo que desde que fue director de “Excélsior”, abrió las puertas a la libertad de 
expresión en México, hoy tan amenazada.
“En lo personal, tuve una relación cercana en los últimos años debido a su
 generosidad, al entregarme las cartas inéditas de Orozco a una niña.
“Durante este tiempo, mis conversaciones con él fueron siempre una lección en
 donde pude percibir una de las inteligencias más brillantes que conocí en mi vida: 
agudo, sensible, fuerte e inteligente”, expresó.
Malvido pugnó por recordar a Scherer, no sólo en la memoria personal, emotiva, sino 
en el ejercicio del oficio de todos los días. “Es momento de releerlo, aprender y recordar
 todo lo que nos enseñó”, dijo.
Jorge. F. Hernández, en su oportunidad, señaló que Scherer fue un maestro para muchos
 de los cronistas y periodistas mexicanos, pero sobre todo, para miles de lectores.
“Fue un personaje que se preocupó siempre por investigar la verdad, por develar las

voz. Su ausencia deja evidentemente un hueco en el alma de México, que

 descanse en paz”, concluyó.

miércoles, 7 de enero de 2015

Caricaturistas mexicanos lamentan atentado

POR: NOTIMEX/MÉXICO, DF.
Rendirán un homenaje a las víctimas con una exposición. (EFE)



Como un hecho inaudito y cruel, así calificaron cartonistas mexicanos al atentado a la revista satírica "Charlie Hedbo" en París, Francia, donde murieron 12 personas, entre ellos los caricaturistas Stéphane Charbonnier "Charb", Jean Cabut, "Cabu", Bernard Verlhac "Tignous" y Georges Wolinski.
El director del Museo de la Caricatura, Juan Terrazas, así como los moneros Agustín Sánchez González, Helioflores, Pedro Sol y Luis Carreño, repudiaron el atentando del que fue objeto el semanario, al tiempo que expresaron su solidaridad con sus colegas franceses.
Terrazas aseguró que los cartonistas que se encuentran en dicho espacio museístico están consternados por lo acontecido y dio a conocer que buscarán la manera de solidarizarse con el envío de un comunicado a la embajada francesa.
Adelantó que rendirán un homenaje a los moneros caídos a más tardar el próximo lunes, con una exposición a cargo de cartonistas mexicanos en la que se prevé plasmar los rostros de los asesinados, tanto en la vitrina que tienen situada en la estación del Metro Zócalo, como en el museo.
Asimismo, Terrazas se dijo sorprendido, toda vez que "se trata de una visión de la intolerancia en el mundo. Estamos dolidos, sobre todo porque es difícil mantener una revista. Nosotros tenemos la revista ‘La pistola’ y es difícil mantenerla y ellos que tienen su semanario que es exitoso, ocurre este tipo de atentados lo cual es grave".
Al respecto, Helioflores mostró su indignación al tiempo que calificó lo ocurrido como un hecho horrible.
"Se me hace de lo más horrible, pues aparte de periodistas, caricaturistas que recuerde hayan sido asesinados, no lo recuerdo. Los cartonistas somos como una familia, nos conocemos nuestros modos y siempre estamos al pendiente de otros colegas en diferentes países.
"La revista ´Charlie´ es muy conocida y exitosa, deseo que encuentren a los culpables y los castiguen como debe de ser", dijo el caricaturista, quien apuntó que con este hecho se atenta contra la libertad de expresión.
Aseguró que el monero no es más que el instrumento, no da renglón, transmite una idea y a mucha gente intolerante lo que le molesta es eso, las ideas del autor, los cartones que plasma.
Helioflores refirió también que el atentado es un crimen contra las ideas, la libertad de expresión, "los moneros, al final, somos los que dibujamos esas ideas".
Recordó que a lo largo de la historia, los cartonistas en el mundo han sido objeto de persecuciones y amenazas, pero nunca antes de asesinatos como el ocurrido en la capital francesa.
"Nunca me imaginé que llegáramos a este grado de deshumanización e intolerancia en el mundo, llegar al extremo de acribillar a una revista de humor, de humor político, de ideas y que no son armas que hieran a otra persona, es lamentable", expresó.
Por su parte, Agustín Sánchez González se dijo sorprendido y calificó el hecho como un acto de intolerancia.
"No podemos permitir la barbarie, y hay que solidarizarnos con toda la humanidad, pues esto no es una ataque contra los caricaturistas, sino contra la humanidad, tan grave como lo fue el 11 de septiembre", expresó Sánchez González, uno de los principales estudiosos de la vida y obra del grabador mexicano José Guadalupe Posada.
Por su parte, el cartonista Pedro Sol comentó que fue una noticia que lamentan todos aquellos que se dedican al humor gráfico y a la prensa en general.
"La publicación es una revista que siempre fue muy crítica, no nada más con musulmanes, sino con todas las religiones. Se fue el equipo original de la publicación y esto se junta con el fallecimiento de del periodista Julio Scherer", comentó.
El caricaturista Luis Carreño dijo que es un pesar lo que sucedió en el semanario francés pues todos, más allá de sus tendencias y de sus criterios, deben ser respetados.
"Arrancar la vida a una persona por sus opiniones en ningún sentido es aceptable ni tolerable, esto nos habla de que hay una intolerancia y esa intolerancia está llegando a extremos de violencia, donde el objetivo es eliminar al contrario y esto no es sano en ninguna sociedad, ni en ningún momento", afirmó.
Carreño subrayó que el humor lleva una crítica a veces ligera y a veces profunda, pero finalmente es un desahogo que empieza siendo unipersonal, pero el éxito radica en que es compartido, a través de un dibujo, sketch o un texto.
"Me apena mucho y lamento que sucedan estas cosas, porque hay que ser respetuosos de la vida humana", expresó.
A su vez, el monero Paco Calderón calificó el atentado de una monstruosidad, sobre todo tratándose de caricaturistas que su único daño es hacer reír y si a alguien no le gusta la caricatura que doble la página y se acabó la agresividad del autor.


Calderón consideró que hay fanáticos que sí pueden hacer este tipo de cosas, por lo que entonces el oficio del caricaturista no es muy seguro, aunque se trata de una actividad muy divertida y "la seguiremos haciendo".

Por el fin de los caudillos

  No a los caudillos, si a la pluralidad Agustín Sánchez González Se les mira por las calles en pequeños grupos, portan un chaleco con l...