domingo, 4 de enero de 2015

VII Mis libros: Diccionario biográfico ilustrado de la caricatura en mexicana

Cuando comencé a trabajar esta compilación histórica acerca de los caricaturistas, jamás imaginé el impacto que  tendría, veinte años después.
El Diccionario biográfico ilustrado de la caricatura mexicana se ha convertido en un libro de culto pues, hasta hoy, no se encuentra nada parecido en el mercado.
Con este trabajp obtuve un apoyo del FONCA  en el concepto de coinversión. Fue publicado por Noriega-Limusa, apoyado por Ramón Garduño, entonces presidente de la Sociedad Mexicana de Caricaturistas, y por Apebas, quien realizó la compilación de imágenes.
Este diccionario fue punto de partido para un vasto trabajo que vengo realizando desde entonces.
Motivo de discusión por quienes se creen depositarios de la verdad en la historia de la caricatura, con el diccionario trabajo se rompió el  monopolio de la información de caricaturistas.
Así que no fue gratuito que un "anónimo" autor escribiera en El Chamuco del 3 de mayo de 1998 una nota llamada "Un diccionario de buenas intenciones y grises resultados", con una rabiosa e incoherente crítica que refuté en El Financiero, en una fecha muy propicia, el 10 de mayo, con un texto llamado "Los caricaturistas me hacen llorar".
Por su parte, el periódico El Universal,  al reseñar la presentación del libro la tituló: "La guerra de la caricatura. "La guerra de la caricatura. Presentación del Diccionario Biográfico Ilustrado de la Caricatura mexicana".
Han pasado 18 años de ese ese momento y el Diccionario requiere una buena reedición incluyendo a muchos autores que, por ser un primer intento de sistematizar, sin exclusiones por simpatía, a muchos autores que quedaron fuera y que entonces no conocía como Marius de Zayas, Tisner y muchas más que a los largo de todos estos años he conseguido datos y, también excluir a quienes fueron flor de un día.
Pero más allá de la descalificación de entonces, me alegra saber que hay un reconocimiento y un culto a ese libro a pesar de todo.
Hay que decir también, y denunciar, cómo en un sitio de internet, una tipeja poblana llama María Idea César Poblana, con toda la impunidad que da la red, abrió un blog donde se fusiló toda la información de mi diccionario y a pesar de las reclamaciones, con todo cinismo, sigue impunemente en la red. Poca vergüenza de esta estudiante de historia de la UAP (aunque supongo que ya terminó)
Vuelvo a lo serio, Roberto Ponce me hizo una entrevista para la revista Proceso, aquí se las dejo.

jueves, 1 de enero de 2015

Primer día del año 15

Aún no termina el primer día de este 2015 y termino  la compilación de caricaturas de un libro homenaje a uno de los grandes caricaturistas de la Revolución Mexicana:
Santiago R. de la Vega, humorista gráfico nacido en Monterrey.

Este cartón se llama a las 12 pm. del 31 y apareció en la revista Multicolor.

De Buenos y malos. El primer texto de 2014





¿Cómo leer a este país en 2014?
Pareciera que la compleja vida mexicana es nueva y no. Hay un permanente retroceso en nuestra vida democrática, una suerte de break dance, donde parece que avanzamos pero en realidad vivimos un retroceso.
Resulta hasta lamentable leer y escuchar tanta proclama de odio y, a su vez, de un embelesamiento hacia "el pueblo", "el pueblo bueno", como dice nuestra versión woodyallenesca de su película Bananas (cuestionar muchas cosas así me ha hecho "perder amigos" en Facebook. Por cierto, casi ni duermo por eso).
Criticamos permanentemente al priismo, pero poco hacemos por romper esa historia. Ni siquiera tenemos la capacidad de analizar frases huecas como “el regreso del PRI”.
Recuerdo que recién ganó las elecciones Fox, me invitaron a un encuentro de intelectuales en Colombia. Fuimos a diversas universidades y yo cuestionaba, ya en el lejano 2000, el final del PRI enunciado por Lorenzo Meyer, lo que desde entonces se mostraba como una falacia: el PAN “tenía” la presidencia, el PRD había ganado el DF (paradójicamente, gracias a la política de Rosario Robles y mediante el fraude de AMLO que no cumplía los requisitos para ser jefe de gobierno).
Traigo a colación ese recuerdo porque ni siquiera hemos sido capaces de entender nuestra historia; mucho menos de mirar cómo el priismo (o su forma de hacer política) impregnó a todos los partidos, a todas las organizaciones y sindicatos, al grado de constituirse en un dique para la democratización del país.
La única historia que conocemos (y vivimos) es la del PRI: miren el inventario de políticos de oposición (en la oposición debía decir). Los más importantes de ellos nacieron en pañales tricolores. La lista es larga, desde Cuauhtémoc Cárdenas hasta López Obrador, pasando por el niño verde cuyo abuelo fue precandidato del PRI a la presidencia en 1970, hasta los petistas de Raúl Salinas, los MC del exgobernador de Veracruz, el PANAL fundado por Elba Esther Gordillo y así, hasta el infinito.
Los mexicanos siguen esperando un milagro, ya sea por la vía de un caudillo mesiánico que llegue a la presidencia y cambie todo, o por la Guadalupana. Pareciera que nadie entiende que este país no cambiará a menos de que cada uno de nosotros comience a tener una participación política y social mínima, desde nuestro barrio, nuestro condominio, nuestra vecindad, nuestras calles, pero también en nuestras escuelas, sindicatos, empresas.
Hay una burda campaña que trata de denostar el dicho de que hay que cambiar cada uno de nosotros. Yo estoy convencido de que así, y sólo así, podremos modificar las formas políticas del país.
Miren qué curioso: los corruptos del partido Verde tienen una campaña inteligente con dos demandas y con una permanente presencia en los medios, en las calles. Su historia de corrupción y demagogia está ahí, con el niño verde, con el diputadete que está en contra de los animales en el circo pero tiene uno en su casa.  Lo peor: tendrán una votación copiosa pues el PRD está desarmado y en ruinas, como el PAN. Al PRI, no sé si le alcance la maquinaria. Los demás sólo son otros vivales.
Necesitamos modificar la formas de hacer política. Y participar, claro está.
 Ni caudillos tropicales demagógicos que rifen las diputaciones, ni política priista tradicional.
O le entramos todos, o acabamos de hundirnos todos.

miércoles, 31 de diciembre de 2014

Siqueiros y Posada

Retrato  de Posada
en el Polyforum Cultural Siqueiros.
Ayer cumplió años uno de los hombres más increíbles de este país: David Alfaro Siqueiros, un personaje novelesco que se fajó contra todo y contra todos. 

Un hombre que fue uno de los presos políticos más notables, justamente hace 55 años ingresó a Lecumberri como tal por su presencia opositora y de izquierda.

Poca gente sabe que Siqueiros fue uno de los primeros autores que menciona la obra de  José Guadalupe Posada, en 1923, cuando escribió con Jan Charlot,  "El movimiento actual de la
pintura en México", en el periódico  El Demócrata: Diario independiente de la mañana. (Por cierto, Siqueiros firmó con el seudónimo de  Juan Hernández Araujo)






Año nuevo

Lo mejor de lo nuevo, es eso:
el estreno de un momento, de una historia.


Lo nuevo es alegría.

Ojalá que haya paz para todo el mundo.


La fiesta del año nuevo, también la dibujó Posada



lunes, 29 de diciembre de 2014

Decir lo Máximo con lo mínimo. Homenaje


Tomo el título que Kap puso a su texto de homenaje.
Máximo ganó, en 2010, el Premio Quevedo, el máximo galardón del humor gráfico en el mundo, una especia de Premio Nobel que se ha entragado a grandes autores como Mingote, Quino o Ziraldo. 

Estos son algunos de sus trabajo.

































Máximo: un genial humorista español.



Máximo. Apenas lo conocí en esa sensacional aventura que es el encuentro de humor gráfico que se realiza en Alcalá de Henares. 

Hoy se ha ido aunque, como dice mi amigo Kap, los humoristas, como todos los artistas, se van el día que dejan de publicar: el 28 de febrero de 2013, ABC publicó su última viñeta.

Me gustaría escribir algo, pero leo a Kap, uno de los humoristas gráficos más geniales que existen en el mundo y dejo sus palabras de hoy. 

Lo decoro con muchas imágenes pues los lectores mexicanos poco sabrán de este hombre que retrató la sociedad española de la segunda mitad del siglo XX y ahora se va o, más bien, se queda en sus imágenes.


Decir lo máximo con el mínimo

 . Barcelona .
 
/ 12/29/2014

Ha muerto Máximo. Ya hacía tiempo que estaba enfermo, en casa, esperando que Caronte le llamara a atravesar la laguna Estigia. Y lo ha hecho un 28 de diciembre, día de los inocentes, para certificar su compromiso absoluto con esta irreverencia mofeta, entre irónica y descreída que practicó todo la vida.
maximo

Máximo es una verdadera rara avis en el panorama de nuestro humor gráfico. Y es que se expresaba mediante muñecos, dibujos, trazos de tinta sobre el papel blanco, sí, pero nunca hizo reír ni quiso hacer. No es que menospreciara el humor, más bien al contrario, se guarecía bajo la libertad expresiva que permite el humor, dejando de lado su vertiente más lúdica.  Para Máximo el humor no formaba parte de los ingredientes con los que cocinaba sus dibujos, sino que era el trinchante con lo desollaba la realidad, o el mortero con el que el desmenuzaba antes de presentarla en sus viñetas de aspecto minimalista pero cargadas de sabores, texturas y matices, como los platos de la alta cocina.Consideraba el dibujo, con palabras o sin, un género literario, e invitaba a los lectores a entrar a leer sus viñetas. Afable y tímido hasta el extremo sus dibujos, por el contrario, eran puntiagudos y ásperos. Fiel discípulo de Steinberg, buscó siempre la manera de decir lo máximo posible dibujando el mínimo. Su adusto trazo de temple con tinta china tendía a la abstracción y deseaba con cargar de significados simbólicos los elementos que dibujaba. Había que hacer un esfuerzo interpretar los elementos gráficos y literarios que configuran su discurso, entre irónico y descreído. Está claro que este esfuerzo por parte del lector, un esfuerzo que no todo el mundo está dispuesto a hacer, hace que su obra no sea fácil, por lo que muchos la han bautizado como el dibujante filósofo. Porque es fácil convertir en filósofo todos aquellos que no somos capaces de entender lo que nos dicen. Más fácil que hacer el esfuerzo de intentar comprenderlo.
Máximo había reflexionado a fondo sobre la condición humana, pero también sobre la condición de dibujante de humor. Por ejemplo, el día que le entregaron el Premio Gat Perich, en Premià, su discurso constituyó una lección magistral sobre lo que es el humor. Máximo fue un pesimista lúcido y utópico que tenía muy claros sus planteamientos éticos y estéticos, y que nunca darse por vencido.Era imposible mantener con él una conversación banal y superficial, ya que con su media sonrisa, te arrastra a reflexionar en profundidad sobre cualquier tema. Toca despedirnos de este moralista radical que expresaba gráficamente. Y lo mejor que podemos hacer es no derramar una lágrima sino intentar dibujar el nuestr rostro una media sonrisa, pero que sea irónica y descreída.
Los obituarios de los periódicos proclaman: "El dibujante Máximo San Juan muere a los 82 años por un paro cardíaco". Pero lo cierto es que Máximo hacía tiempo que no estaba entre nosotros. Los dibujantes de prensa dejamos este mundo el día que ya no podemos publicar nuestra viñeta diaria.Es decir que, aunque no embarcó en ella hasta ayer, Máximo ya tenía su billete para hacer un crucero por la laguna Estigia desde el 28 de febrero 2013, cuando el diario ABC publicó su última viñeta.

Por el fin de los caudillos

  No a los caudillos, si a la pluralidad Agustín Sánchez González Se les mira por las calles en pequeños grupos, portan un chaleco con l...